En siete minutos una granizada destruyó este jueves viñedos del Este mendocino

Una fuerte granizada afectó vastas zonas productivas del este de Mendoza, especialmente la localidad de Medrano (Rivadavia), Duró 7 minutos y arruinó un 80% de viñedos y un 20% de frutales.

GRANIZADA
La fuerte tormenta que afectó al Este provincial este jueves dañó, en promedio, al 80% de viñedos y 20% de frutales.

Una fuerte granizada afectó vastas zonas productivas del este de Mendoza, especialmente la localidad de Medrano, en el departamento de Rivadavia, a unos 60 kilómetros de la capital provincial, informó este jueves Defensa Civil.

El Servicio Meteorológico Nacional informó que el fenómeno, de gran intensidad, duró 7 minutos y arruinó un 80% de viñedos y un 20% de frutales en la zona afectada por el fenómeno meteorológico. En la provincia rige alerta amarilla para todo el territorio.

La mayor granizada ocurrida en la noche del pasado miércoles duró 7 minutos, fue de gran intensidad y se estima que dañó un 80% de viñedos y un 20% de frutales en la zona afectada por el fenómeno meterológico.

Tanto el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) como Defensa Civil de Mendoza emitieron este jueves un alerta amarilla por la probabilidad de nuevas tormentas que afectarían diferentes zonas en todo el territorio provincial.

“Lo perdí todo”, el testimonio de un productor desolado

En sus 20 años como contratista –de los 47 que tiene de vida-, Héctor Álvarez no recuerda una granizada como la que vivió (y sufrió) anoche en la finca donde trabaja como contratista, en la calle Oratorio, entre Medrano y Tres Esquinas, en el límite entre Rivadavia y Junín; en el este de Mendoza. Son, en total, 7 las hectáreas las que tiene a su cargo, y son 7 hectáreas en las que no quedó absolutamente nada.

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Héctor Álvarez, contratista afectado por la intensa granizada en Medrano. (Foto Los Andes)

“Estoy matado, esto ha sido catastrófico. Algo nunca visto…”, piensa –con dolor- y con una voz apenas perceptible, que escapa de la misma boca en la que mantiene una mueca de angustia y desolación. “Esto es lo que trabajo todo el año y no me ha quedado nada. Nada de nada”, declaró a Diaraio Los Andes.

“Las pérdidas han sido totales, pero no de 100%. Acá decimos que han sido de 130%, por lo menos, porque no solo perdimos la cosecha de este año, sino también la del año que viene. Acá había viñedos, cerezos, olivos, durazno. Y no quedó nada”, repasa y lamenta Héctor. Y, una vez más, se queda callado. (Fuentes: Télam, El Sol, Los Andes)

El ABC Rural