Fueron casi 50 los oradores que, con diversas posturas, dieron tratamiento al proyecto para una nueva Ley de Biocombustibles. Finalmente, luego de intenso debate, en la madrugada de este viernes con 135 votos positivos, 110 negativos y dos abstenciones, el oficialismo logró su aprobación con media sanción. El proyecto deberá pasar ahora a la Cámara de Senadores.
Asimismo, el régimen actual fue extendido durante 60 días para poder facilitar el debate de la ley. Esta iniciativa aprobada por la Cámara Baja, resulta una alternativa muy diferente al proyecto que tiene media sanción en el Senado, que proponía extender la ley actual por cuatro años más.
La iniciativa aprobada, contó con el respaldo del Frente de Todos y bloques aliados, y fue rechazado por Juntos por el Cambio -aunque algunos de sus miembros de provincias azucareras votaron a favor-, Consenso Federal, el socialismo y la izquierda.
¿Cómo será el nuevo marco regulatorio?
Si esta nueva propuesta resulta aprobada en la Cámara Alta, el nuevo marco regulatorio establecería un corte del 5% para el gasoil y el biodiesel y del 12% entre las naftas y bioetanol.
Reemplazaría a la ley que estableció el Régimen de Promoción de Biocombustibles, que luego de 15 años de implementación, fue prorrogada hasta el 12 de julio.
El nuevo marco, que tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de 2030, reduce del 10% al 5% el corte obligatorio entre gasoil y biodiesel, a diferencia del combustible elaborado a base de caña de azúcar, en que los volúmenes deberán ser del 6% de la mezcla obligatoria.
Pero no solo eso. Lo que más preocupa al sector es que facultará a la Secretaría de Energía a reducir ese porcentaje a un 3% ante situaciones excepcionales, es decir, “cuando el incremento en los precios de los insumos básicos para la elaboración del biodiésel pudiera distorsionar el del combustible fósil en el surtidor, o ante situaciones de escasez por parte de las empresas elaboradoras”.
En cuanto a las naftas, el corte mínimo obligatorio de bioetanol se mantiene en un 12%, mientras que para los combustibles a base de caña de azúcar y caña de maíz el corte mínimo cierra en un 6%, según el texto del proyecto en debate.
El ABC Rural