Todavía hay US$ 8500 millones de soja y maíz en silobolsas

Según datos de Ciara-CEC, restan vender 10 millones de toneladas de soja y otros 7 millones de maíz. El empresario Roberto Urquía, dueño de AGD, sostiene que los productores no venderán debido al atraso cambiario.

silobolsas

Este miércoles el Banco Central vendió US$ 83 millones, ante el menor flujo de liquidación de divisas por parte del sector agroindustrial. Durante octubre, las cerealeras no solo vendieron en el mercado único y libre de cambios (MULC) un 85% menos de dólares, sino que hubo una caída en la venta de soja del 90%. Esto quiere decir que todavía existe un gran stock de granos en silobolsas.

Según se desprende del informe Monitor Agroindustrial que publica mensualmente la Ciara-CEC, todavía quedan sin vender 10,6 millones de toneladas de soja y otros 7 millones de maíz. A los valores FOB del 1 de noviembre, el sector agroindustrial está sentado sobre 8500 millones de dólares que todavía no ingresan a las reservas del Banco Central, ni aportan al fisco vía retenciones.

Menos ventas de soja y maíz

En octubre, se comercializaron solo 596.000 toneladas de soja frente a los 13 millones de septiembre, motorizados por el dólar-soja. El resultado de octubre fue el registro más bajo desde diciembre 2021, y representó una caída del 90% en comparación con septiembre y del 60% en relación a agosto.

Las ventas totales de soja acumuladas a octubre llegaron a los 29,3 millones de toneladas, el 70% de una producción de 42 millones. Por lo tanto, quedan sin vender un poco más de 10 millones. El valor FOB para la oleaginosa (sin descontar retenciones) se ubica en los US$ 607. Por ende, solo por soja podrían concretarse operaciones por USD6434 millones.

“Los productores no van a vender porque no quieren quedarse con los pesos”, sostuvo Roberto Urquía, dueño de Aceitera General Deheza (AGD), uno de los grandes ganadores del dólar soja.

Para este empresario y ex senador del PJ, lo que motiva a no vender sería el retraso en el tipo de cambio, según manifestó en declaraciones a FM La Patriada (Tarde sin fondo). Por eso no sería de extrañar que a medida que pasen los meses, los grandes jugadores del mercado vuelvan a presionar por un nuevo tipo de cambio diferencial.

En maíz ocurre algo similar. Hasta el mes pasado, los productores vendieron 37,5 millones de toneladas, una caída de casi 3,1 millones de toneladas frente al mismo período de la campaña anterior. Según Ciara-CEC, todavía faltan vender 7,1 millones de toneladas, que a un valor FOB de 306 dólares, permitiría ingresos por 2142 millones.

¿Qué pasará con el trigo?

A partir de diciembre se debería dar inicio al ingreso de los dólares de las exportaciones trigueras. A las potenciales pérdidas de USD1500 millones por una merma en la producción cercana al 30%, ahora se le suma la reprogramación de embarques. El Gobierno había permitido adelantar exportaciones por 9 millones de toneladas, para asegurarse el cobro por adelantado de los derechos de exportación.

Pero ante la baja cosecha como consecuencia de la sequía, las cerealeras tuvieron que recalcular sus ventas para no dejar de venderle a Brasil, su principal socio comercial. Luego de esta tensión, se publicó en el Boletín Oficial la reprogramación de los embarques.

En el caso del trigo, los primeros meses del año próximo estarán signados por una puja entre el mercado interno y la exportación. Algunos molinos ya empezaron a informar aumentos en la bolsa de harina con la excusa de la sequía, convalidando una suba en el precio del grano que todavía no se registra en pizarras. Este contexto demandará una fina administración del comercio exterior. (Sebastián Premici/ BAE Negocios)

El ABC Rural