El cierre de pequeños y medianos tambos continúa acelerando su tendencia, en los productores lecheros. Escala, factores climáticos, falta de recurso humano calificado y políticas económicas confiables, son algunos de los problemas que ayudan a “colmar el vaso” en el negocio.
Ante la situación que vienen atravesando los productores lecheros y que se exacerbaron con la implementación del nuevo Programa de Incremento Exportador para la soja anunciado hace unas semanas, así se manifestó la Caprolecoba, la Cámara que agrupa productores lecheros en el oeste de Buenos Aires.
“En la lechería nos cuesta entender qué es lo que quieren hacer con nuestra actividad. Se explicó muchas veces lo que aportamos al país y cuánto más podemos dar aún, si nos dejaran trabajar tranquilos, libres y con reglas de juego justas, claras y estables. Hablamos con todos y somos colaborativos. Y las intervenciones restrictivas y distorsivas, tipo “dólar soja II”, siguen cayendo como misiles sobre nuestras cabezas”, señalaron desde la Caprolecoba.
Situación de la producción en noviembre
La producción acumulada hasta noviembre de este año ya está en paridad con la del año previo, y es probable que termine ligeramente por debajo a la de 2021.
“Todos los factores mencionados el mes pasado se han agravado, y encima cayó el ‘dólar soja II’, que elevó más los costos (sumados, más de 15%) y empeoró las relaciones de precio de la leche”, destacó la Cámara.
De esta forma, desde la Caprolecoba indican que la caída estacional de producción, se ve exacerbada, sobre todo en los tambos que se han quedado sin suficientes recursos propios para alimentar a las vacas (pasto y reservas).
El ABC Rural