¿Cuál es la verdadera causa de la caída del consumo de carne en la Argentina?

En 2020, año claramente signado por la pandemia, el consumo de carne vacuna por habitante cerró en una media de 50,4 kilos anual, el nivel más bajo de la última década. Sin embargo la caída continúa profundizándose.

exportación de carnes

A pesar de absorber casi dos tercios de la producción nacional, el consumo doméstico en Argentina no deja de ser, en realidad, un gran “saldo no exportable”, un canal que absorbe todo aquello no lleva la exportación.

Es quizás esta dinámica la que lo posiciona siempre como el eslabón más débil, plausible de ser un argumento perfecto para la implementación de
medidas resarcitorias que, muchas veces, carecen de visión estratégica de largo plazo.

“En consecuencia, sin crecimiento productivo, a mayor exportación indefectiblemente tendremos menor saldo para destinar al consumo, un círculo del cual aún no se pudo salir plenamente”, sostienen desde el mercado ganadero Rosgan.

Flecha hacia abajo

En 2020, año claramente signado por la pandemia, el consumo de carne vacuna por habitante cerró en una media de 50,4 kilos anual, el nivel más bajode las últimas décadas. Sin embargo, el consumo total de carnes en Argentina prácticamente no ha sufrido variaciones en los últimos años, pero sí lo hizo su composición.

carne vacuna

En 2010 se consumían -de acuerdo a las estadísticas oficiales- 58 kg de carne vacuna, 35 kg de pollo y 8 kg de cerdo, es decir 101 kg totales. En 2020, el consumo de carne vacuna cayó a 50 kg, el pollo pasó a 45 kg y el cerdo a unos 14 kg per cápita.

“Claramente, el consumidor también ha experimentado cambios en sus hábitos de consumo que lo llevan a incorporar otras opciones proteicas, tanto de origen animal como vegetal”, sostiene el informe.

La verdadera causa de la caída

Si valuamos este consumo en base a los precios promedio relevados por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), podemos estimar cuanto ha variado el gasto medio de cada argentino en el último año.

El cálculo arroja que mientras en 2019, el gasto promedio en los tres tipos de carne alcanzaba los $ 19.500 anuales, en 2020 ese gasto se vio incrementado en un 45%, para ubicarse en $28.100 anuales, moneda corriente.

Es entonces cuando debemos preguntamos, ¿cuál es la verdadera causa de la caída en el consumo?. ¿Falta oferta o falta capacidad de compra?. Una pregunta cuya respuesta pareciera tener un alto costo de sinceramiento que, por el momento, no se pretende asumir.

Limitar las exportaciones en defensa del consumo interno, pareciera tener una mayor resonancia en términos electorales, en especial sobre aquellos sectores que se intenta retener. Sin embargo, esta falta de sinceramiento podría llevarnos nuevamente a una historia conocida, cuyos resultados aun los estamos sufriendo.

El ABC Rural